lyrics
Desertores del arado,
que un día cambiasteis
el azadón por el subfusil.
Desde el seco campo,
hasta el asfalto,
un día llegasteis
para oprimir, para reprimir.
Un puñado de dinero
y un lavado de cerebro,
fueron suficientes para hacer de ti,
ese asesino carnicero que el ver correr la sangre
no le impide en ningún momento
dejar de dormir.
Hombres, mujeres y niños, víctimas inocentes
del vuelo salvaje, en picado
de los escuadrones de la muerte.
Las espaldas cubiertas con el lenguaje de las armas,
protegidos del oligarca, del fascista sucia baza,
del estado la mordaza, de la muerte la guadaña.
Siempre lloviendo sobre mojado,
siempre los golpes al bajo vientre,
siempre reciben los mismos,
siempre recibe la misma gente.
Peones que mueve el dinero pudiente
como setas, crecen y se multiplican,
impunes actúan, saquean, torturan,
siguen volando los escuadrones de la muerte.
Guerra sucia, abuso y muerte,
escuadrones de la muerte,
terror psicológico, la ley del más fuerte,
escuadrones de la muerte,
impunes actúan sintiéndose fuertes.
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